El rincón de las arañas

Marche un especial

5 Jan , 2019  

Prof. Hermes J. Sanabria

¿Cuántas veces se ha hablado de que las buenas rachas no duran para siempre? Un día, un entrenador puede estar en la conversación para determinar si es el mejor del mundo en lo suyo, otro día puede ser considerado obsoleto. Así es la trayectoria de José Mourinho, que pasó de estar al nivel de Guardiola a estar más desubicado que un comentario de política en Instagram (vieron que hay que estar actualizado, siempre).

Hoy, el mundo del fútbol ve a uno de los entrenadores más ganadores como se ve a esas cosas anacrónicas que nadie sabe para qué sirven, si es que sirven. Quien supo ser apodado “El especial”, marchó de la dirección técnica del Manchester United como marcha un especial en una cafetería a las cinco de la tarde y la gente llega con hambre después del trabajo: rápido. Porque rápida fue su debacle, igual que la decadencia de su método de trabajo y el derrumbe de su llegada con los jugadores. ¿Se habrá olvidado tan rápido de cómo dirigir? Creemos que no, pero el fútbol es muy vertiginoso y no espera por nadie. Ni por los especiales. Un día usted puede ser el único entrenador en ganar la Champions League con tres equipos de países diferentes y otro día, puede perder la pulseada de un vestuario contra tres jugadores de países diferentes que nunca jugaron la Champions League. Pasa en las mejores familias.

Por eso, hay que saber dar un paso al costado. Nos pasó cuando creímos cumplir un ciclo al frente del Sportivo Carabelas y la directiva nos insistía para cumplir nuestra vigesimoquinta temporada al frente del primer equipo. Pero, aunque estaban dadas las condiciones para seguir, entendíamos que la brecha con las nuevas generaciones exigía un cambio. Mire si nos iba mal, y la dirigencia nos traía como reemplazo a un joven jugador recientemente retirado que se entendiera mejor con el plantel.

Por suerte la vimos toda y pudimos encontrar un lugar desde el que poder volcar nuestras vivencias en el mundo del fútbol, desde la tranquilidad de nuestro escritorio y sin más intermediarios entre nuestros pensamientos y la hoja que la máquina de escribir. Y, dado que creemos firmemente en el reciclaje, entendemos que no hay que tirar a un profesional de la talla de Mourinho a la basura. Si hasta aquellos especiales que se ponen duros, quedan como nuevos con un golpe de horno.

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